lunes, 6 de junio de 2011

"Espantando la decepción".

Me aturde el liviano recuerdo que me llega de ti.
En mi raciocinio, imágenes sacuden mi desengaño,
éstas se hallan tan perdidas que se niegan a hacer mudanza.
Bajo mi coraza advierto restos de desvaríos,
de noches de excesos, pasión y carmín,
en éllos se percibe el turbio sabor de tus besos.
Hoy tienen un cierto sabor a plata envejecida,
la misma que sigilosa permanece en tu mano,
sosteniendo tu orgullo.
Frente al espejo intento espantar la decepción,
desnudando mi cuerpo y mi alma.
Me has cruzcficado una y mil veces,
pero ante mi reflejo, asombrada me percato
que Judas se halla frente a mí.

3 comentarios:

  1. Crucificarte extasiado y morirse.
    Eres la esencia en si.

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  2. Si enlazo este poema con el anterior, deduzco que aún no has podido olvidarlo... Me gusta la figura del "sabor a plata envejecida".

    saludos

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